57FAGOTERAPIA: UNA ALTERNATIVA TERAPÉUTICA PROMETEDORA
CUANDO LOS ANTIBIÓTICOS NO FUNCIONAN.Volumen 14 Número 2 - 2023
RESUMEN
ABSTRACT
Phage therapy: A Promising Therapeutic Alternative When
Antibiotics Fail
FAGOTERAPIA: UNA ALTERNATIVA TERAPÉUTICA
PROMETEDORA CUANDO LOS ANTIBIÓTICOS NO
FUNCIONAN.
(1) Carrera de Nutrición y Dietética. Escuela Superior Politécnica de Chimborazo, Riobamba, 060101, Ecuador.
Correspondencia: Igor Eduardo Astudillo Skliarova. Carrera de Nutrición y Dietética. Escuela Superior Politécnica de Chimborazo, Riobamba,
060101, Ecuador. igor.astudillo@espoch.edu.ec
Introducción: Durante décadas, la fagoterapia ha sido ampliamente empleada para el tratamiento de diversas
enfermedades infecciosas. Sin embargo, con el advenimiento de los antibióticos, su uso disminuyó. En la
actualidad, el resurgimiento de la fagoterapia representa un recordatorio de su importancia histórica y un
enfoque prometedor en la lucha contra las infecciones resistentes a los antibióticos. Objetivo: Evaluar la eficacia
de la fagoterapia en pacientes con infecciones causadas por bacterias resistentes a antibióticos. Métodos: La
presente revisión bibliográfica tiene un enfoque descriptivo y se centra en los casos clínicos más recientes,
donde se empleó la fagoterapia para tratar infecciones causadas por bacterias resistentes a antibióticos. Se
establecieron como criterios de inclusión los casos clínicos de los últimos cinco años disponibles en la base de
datos Pubmed relacionados con el uso de la fagoterapia. Resultados: Se seleccionaron 59 informes de casos
clínicos que cumplieron con los criterios de inclusión, y se encontró que la fagoterapia tiene una alta eficacia
en el tratamiento de infecciones bacterianas en pacientes con trasplante de órganos, infecciones de prótesis
y dispositivos médicos, infecciones en pacientes con fibrosis quística e infecciones al sistema nervioso central.
En algunos de estos casos, la fagoterapia fue usada en combinación con antibióticos, aumentando la eficacia
de estos últimos. Discusión: En todos los casos analizados, la fagoterapia se mostró como una opción segura
y en la mayoría de ellos, demostró ser altamente eficaz. Además, se evidenció su capacidad para erradicar
biopelículas, y en algunos casos, se observó una mejora en la eficacia de los antibióticos cuando se utilizó en
combinación con los fagos. Conclusiones: Los resultados de estos estudios demuestran que la fagoterapia es
una excelente alternativa al uso de antibióticos, especialmente en el tratamiento de infecciones causadas por
bacterias resistentes a estos medicamentos.
Palabras clave: fagoterapia, bacteriófagos, bacterias multirresistentes, terapia adjunta, infecciones sistémicas.
Introduction: For decades, phage therapy has been widely used to treat various infectious diseases. However,
with the advent of antibiotics, its use declined. Nowadays, the resurgence of phage therapy serves as a reminder
of its historical significance and a promising approach in the fight against antibiotic-resistant infections.
Objective: To evaluate the efficacy of phage therapy in patients with infections caused by antibiotic-resistant
bacteria. Methods: This bibliographic review adopts a descriptive approach, focusing on recent clinical cases
where phage therapy was employed to treat infections caused by antibiotic-resistant bacteria. Clinical cases
from the last five years available in the Pubmed database related to phage therapy were included as criteria.
Results: A total of 59 clinical case reports that met the inclusion criteria were selected, and it was found that
phage therapy demonstrated high efficacy in treating bacterial infections in patients with organ transplants,
Igor Eduardo Astudillo Skliarova (1) * igor.astudillo@espoch.edu.eciD
https://cssn.espoch.edu.ec
Facultad de
Salud Pública
BY
Julio-diciembre 2023
Vol. 14 Núm. 2
ISSN 1390-874X
Recibido: 19-06-2023 · Aceptado: 01-08-2023 · Publicado: 04-08-2023
ARTÍCULO DE REVISIÓN
58Igor Eduardo Astudillo Skliarova, et al.Volumen 14 Número 2 - 2023
prosthetic and medical device infections, cystic fibrosis infections, and central nervous system infections. In some
of these cases, phage therapy was used in combination with antibiotics, enhancing the effectiveness of the latter.
Discussion: In all analyzed cases, phage therapy was shown to be a safe option, and in most instances, it proved
to be highly effective. Furthermore, its ability to eradicate biofilms was evident, and in some cases, there was
an improvement in the efficacy of antibiotics when used in combination with phages. Conclusions: The results
of these studies demonstrate that phage therapy is an excellent alternative to antibiotics, particularly in the
treatment of infections caused by antibiotic-resistant bacteria
Keywords: phage therapy, bacteriophages, multidrug-resistant bacteria, adjunctive therapy, systemic
infections.
La fagoterapia es una terapia experimental que
utiliza bacteriófagos, también conocidos como
fagos, como agentes antimicrobianos para
combatir infecciones bacterianas. Los fagos son
virus que infectan y replican dentro de bacterias
específicas, lo que les permite destruir o debilitar
a los patógenos bacterianos (1).
La historia de la fagoterapia se remonta a
principios del siglo XX, cuando los bacteriófagos
fueron descubiertos de manera independiente
por los científicos Frederick Twort en 1915 y Félix
d'Herelle en 1917. D'Herelle acuñó el término
"bacteriófago" para describir a estos virus que
atacaban bacterias (2).
En la década de 1920, d'Herelle y otros
investigadores comenzaron a explorar las
posibles aplicaciones terapéuticas de los fagos (3).
La fagoterapia se convirtió en una herramienta
prometedora para tratar infecciones bacterianas,
y d'Herelle obtuvo resultados alentadores al usar
fagos para tratar pacientes con enfermedades
como la disentería bacilar y el cólera (4).
Durante varias décadas, la fagoterapia fue
utilizada en Europa del Este y la Unión Soviética
como una forma de tratamiento médico. Sin
embargo, con el descubrimiento y desarrollo
de los antibióticos en la década de 1940, la
atención médica se desvió hacia estos nuevos
agentes antimicrobianos, y la fagoterapia quedó
en gran medida relegada a un segundo plano en
Occidente (2, 5).
En los últimos años, ha habido un renovado
interés en la fagoterapia debido al aumento
de las infecciones bacterianas resistentes a
los antibióticos y a la necesidad de buscar
alternativas terapéuticas efectivas. Se han llevado
a cabo investigaciones y ensayos clínicos para
evaluar la eficacia y seguridad de la fagoterapia
1. Introducción
2. Metodología
3. Resultados
en el tratamiento de diversas enfermedades
infecciosas (6).
Si bien la fagoterapia todavía se considera una
terapia experimental en muchos países, ha
habido avances significativos en la comprensión
de los mecanismos de acción de los fagos y en la
optimización de su uso clínico. A medida que se
acumula más evidencia científica, la fagoterapia
tiene el potencial de convertirse en una opción
terapéutica importante en el tratamiento de
La búsqueda se efectuó usando la base de datos
Pubmed, la cual es la más extensa y completa de
artículos científicos. Se buscó exclusivamente
artículo en el idioma inglés y se usó la palabra
clave «phage therapy». Se aplicaron filtros en la
búsqueda para obtener artículos publicados en
los últimos cinco años y que sean informes de
casos clínicos.
La base de datos arrojó un total de 59 informes
de casos clínicos a la fecha del 19 de junio del
2023. La mayoría de estos (aproximadamente la
cuarta parte) describe el uso de bacteriófagos
como único método o como terapia adjunta en
combinación con los antibióticos en pacientes
que habían tenido un trasplante de órgano:
pulmón, hígado o riñón. Otros estudios describen
el uso de la fagoterapia para el tratamiento de
infecciones a las vías urinarias, infecciones a los
huesos, infecciones a la piel y tejidos blandos,
infecciones a prótesis y dispositivos médicos.
Algunos casos describen el uso de la fagoterapia
en casos de bacteriemia y en casos de pacientes
que padecen de fibrosis quística. En esta revisión
se tomaron en consideración los estudios más
prosthetic and medical device infections, cystic fibrosis infections, and central nervous system infections. In some
of these cases, phage therapy was used in combination with antibiotics, enhancing the effectiveness of the latter.
Discussion: In all analyzed cases, phage therapy was shown to be a safe option, and in most instances, it proved
to be highly effective. Furthermore, its ability to eradicate biofilms was evident, and in some cases, there was
an improvement in the efficacy of antibiotics when used in combination with phages. Conclusions: The results
of these studies demonstrate that phage therapy is an excellent alternative to antibiotics, particularly in the
treatment of infections caused by antibiotic-resistant bacteria
Keywords: phage therapy, bacteriophages, multidrug-resistant bacteria, adjunctive therapy, systemic
infections.
La fagoterapia es una terapia experimental que
utiliza bacteriófagos, también conocidos como
fagos, como agentes antimicrobianos para
combatir infecciones bacterianas. Los fagos son
virus que infectan y replican dentro de bacterias
específicas, lo que les permite destruir o debilitar
a los patógenos bacterianos (1).
La historia de la fagoterapia se remonta a
principios del siglo XX, cuando los bacteriófagos
fueron descubiertos de manera independiente
por los científicos Frederick Twort en 1915 y Félix
d'Herelle en 1917. D'Herelle acuñó el término
"bacteriófago" para describir a estos virus que
atacaban bacterias (2).
En la década de 1920, d'Herelle y otros
investigadores comenzaron a explorar las
posibles aplicaciones terapéuticas de los fagos (3).
La fagoterapia se convirtió en una herramienta
prometedora para tratar infecciones bacterianas,
y d'Herelle obtuvo resultados alentadores al usar
fagos para tratar pacientes con enfermedades
como la disentería bacilar y el cólera (4).
Durante varias décadas, la fagoterapia fue
utilizada en Europa del Este y la Unión Soviética
como una forma de tratamiento médico. Sin
embargo, con el descubrimiento y desarrollo
de los antibióticos en la década de 1940, la
atención médica se desvió hacia estos nuevos
agentes antimicrobianos, y la fagoterapia quedó
en gran medida relegada a un segundo plano en
Occidente (2, 5).
En los últimos años, ha habido un renovado
interés en la fagoterapia debido al aumento
de las infecciones bacterianas resistentes a
los antibióticos y a la necesidad de buscar
alternativas terapéuticas efectivas. Se han llevado
a cabo investigaciones y ensayos clínicos para
evaluar la eficacia y seguridad de la fagoterapia
1. Introducción
2. Metodología
3. Resultados
en el tratamiento de diversas enfermedades
infecciosas (6).
Si bien la fagoterapia todavía se considera una
terapia experimental en muchos países, ha
habido avances significativos en la comprensión
de los mecanismos de acción de los fagos y en la
optimización de su uso clínico. A medida que se
acumula más evidencia científica, la fagoterapia
tiene el potencial de convertirse en una opción
terapéutica importante en el tratamiento de
La búsqueda se efectuó usando la base de datos
Pubmed, la cual es la más extensa y completa de
artículos científicos. Se buscó exclusivamente
artículo en el idioma inglés y se usó la palabra
clave «phage therapy». Se aplicaron filtros en la
búsqueda para obtener artículos publicados en
los últimos cinco años y que sean informes de
casos clínicos.
La base de datos arrojó un total de 59 informes
de casos clínicos a la fecha del 19 de junio del
2023. La mayoría de estos (aproximadamente la
cuarta parte) describe el uso de bacteriófagos
como único método o como terapia adjunta en
combinación con los antibióticos en pacientes
que habían tenido un trasplante de órgano:
pulmón, hígado o riñón. Otros estudios describen
el uso de la fagoterapia para el tratamiento de
infecciones a las vías urinarias, infecciones a los
huesos, infecciones a la piel y tejidos blandos,
infecciones a prótesis y dispositivos médicos.
Algunos casos describen el uso de la fagoterapia
en casos de bacteriemia y en casos de pacientes
que padecen de fibrosis quística. En esta revisión
se tomaron en consideración los estudios más
59FAGOTERAPIA: UNA ALTERNATIVA TERAPÉUTICA PROMETEDORA
CUANDO LOS ANTIBIÓTICOS NO FUNCIONAN.Volumen 14 Número 2 - 2023
4. Discusión
La fagoterapia ha surgido como una prometedora
alternativa al uso de antibióticos en el tratamiento
de enfermedades infecciosas. A diferencia de los
antibióticos convencionales, que deben enfrentar
desafíos en términos de resistencia bacteriana,
los fagos son virus que específicamente infectan
y eliminan bacterias patógenas (7). Estos fagos
tienen la capacidad de adherirse a la superficie de
las bacterias, penetrar en su interior y replicarse,
lo que finalmente lleva a la lisis y destrucción de
las bacterias. Además, los fagos son altamente
específicos, lo que significa que pueden dirigirse
a cepas bacterianas específicas sin afectar a la
microbiota normal del cuerpo (8).
Al igual que cualquier otra terapia, la fagoterapia
presenta ventajas y desventajas. Entre las
ventajas de la fagoterapia se encuentran su
alta especificidad, ya que los fagos solo atacan
bacterias específicas, preservando la microbiota
normal del cuerpo (9). Sin embargo, también
existen desventajas, como la dificultad para
identificar y seleccionar los fagos adecuados
para cada infección, así como los posibles efectos
secundarios asociados con la liberación de toxinas
bacterianas durante el proceso de lisis (10).
Aunque se han realizado estudios prometedores
en la fagoterapia, es necesario llevar a
cabo más investigaciones para comprender
completamente su eficacia y seguridad. Varios
estudios sugieren que la fagoterapia puede
aumentar la eficacia de los antibióticos cuando
se usa como terapia complementaria (11).
relevantes, publicados en revistas de más alto
factor de impacto o que han sido citados en más
ocasiones.
En la búsqueda, se priorizó el análisis de casos que
involucraban pacientes con factores de riesgo
específicos. De esta manera, se encontraron 19
casos en los que se empleó la fagoterapia en
pacientes que habían recibido un trasplante de
órganos, 11 casos con el uso de la fagoterapia
en pacientes portadores de algún dispositivo
médico, 8 casos con el uso de la fagoterapia en
pacientes con prótesis, 8 casos en pacientes con
fibrosis quística, y se identificó un caso de un
paciente con infección en el sistema nervioso
central. Los demás casos analizados describían
pacientes sin factores de riesgo específicos.
Fagoterapia en infecciones de pacientes con
trasplante de órganos.
En uno de los casos, un paciente de 15 años con
fibrosis quística y una infección diseminada por
Mycobacterium abscessus fue tratado con un
cóctel de tres fagos después de un trasplante
bilateral de pulmón. Se desarrollaron fagos líticos
genéticamente modificados que demostraron
gran eficacia contra la cepa infecciosa de M.
abscessus (12). Es importante destacar que la
fibrosis quística es una enfermedad genética
que afecta a los pulmones y al sistema digestivo,
causando obstrucción y problemas respiratorios
(13). En consecuencia, esta condición debilita
el sistema inmunitario. El paciente en cuestión
recibió un tratamiento intravenoso con fagos, el
cual fue bien tolerado y se asoció con una mejora
clínica objetiva, que incluyó el cierre de la herida
esternal, una mejoría en la función hepática y una
resolución sustancial de los nódulos cutáneos
infectados (12).
En otro caso, un paciente de 12 años con
fibrosis quística trasplantado de pulmón recibió
dos rondas de terapia con fagos debido a
una infección pulmonar persistente causada
por Achromobacter xylosoxidans resistente a
múltiples fármacos. La tolerancia clínica fue
perfecta, pero en el lavado broncoalveolar inicial
aún se detectó crecimiento de A. xylosoxidans.
La condición respiratoria del paciente mejoró
lentamente y se suspendió la terapia de oxígeno.
La colonización de las vías respiratorias por
A. xylosoxidans de baja intensidad persistió
durante meses antes de que las muestras dieran
resultados negativos (14).
En otro estudio, se reportó que dos pacientes
con trasplante de pulmón dependientes de
ventilador con complicaciones en las vías
respiratorias superiores y neumonía refractaria
por Pseudomonas aeruginosa multirresistente
respondieron clínicamente a la fagoterapia y
fueron dados de alta del hospital sin necesidad
de soporte ventilatorio (15). En otro estudio, un
paciente de sexo mujer de 26 años infectada
por la misma bacteria y que adicionalmente
presentaba insuficiencia respiratoria persistente
y fallo renal inducido por colistina recibió una
terapia intravenosa con bacteriófagos junto con
antibióticos sistémicos. Esta terapia no produjo
eventos adversos y conllevó a la resolución
clínica de la infección. Esta paciente no presentó
CUANDO LOS ANTIBIÓTICOS NO FUNCIONAN.Volumen 14 Número 2 - 2023
4. Discusión
La fagoterapia ha surgido como una prometedora
alternativa al uso de antibióticos en el tratamiento
de enfermedades infecciosas. A diferencia de los
antibióticos convencionales, que deben enfrentar
desafíos en términos de resistencia bacteriana,
los fagos son virus que específicamente infectan
y eliminan bacterias patógenas (7). Estos fagos
tienen la capacidad de adherirse a la superficie de
las bacterias, penetrar en su interior y replicarse,
lo que finalmente lleva a la lisis y destrucción de
las bacterias. Además, los fagos son altamente
específicos, lo que significa que pueden dirigirse
a cepas bacterianas específicas sin afectar a la
microbiota normal del cuerpo (8).
Al igual que cualquier otra terapia, la fagoterapia
presenta ventajas y desventajas. Entre las
ventajas de la fagoterapia se encuentran su
alta especificidad, ya que los fagos solo atacan
bacterias específicas, preservando la microbiota
normal del cuerpo (9). Sin embargo, también
existen desventajas, como la dificultad para
identificar y seleccionar los fagos adecuados
para cada infección, así como los posibles efectos
secundarios asociados con la liberación de toxinas
bacterianas durante el proceso de lisis (10).
Aunque se han realizado estudios prometedores
en la fagoterapia, es necesario llevar a
cabo más investigaciones para comprender
completamente su eficacia y seguridad. Varios
estudios sugieren que la fagoterapia puede
aumentar la eficacia de los antibióticos cuando
se usa como terapia complementaria (11).
relevantes, publicados en revistas de más alto
factor de impacto o que han sido citados en más
ocasiones.
En la búsqueda, se priorizó el análisis de casos que
involucraban pacientes con factores de riesgo
específicos. De esta manera, se encontraron 19
casos en los que se empleó la fagoterapia en
pacientes que habían recibido un trasplante de
órganos, 11 casos con el uso de la fagoterapia
en pacientes portadores de algún dispositivo
médico, 8 casos con el uso de la fagoterapia en
pacientes con prótesis, 8 casos en pacientes con
fibrosis quística, y se identificó un caso de un
paciente con infección en el sistema nervioso
central. Los demás casos analizados describían
pacientes sin factores de riesgo específicos.
Fagoterapia en infecciones de pacientes con
trasplante de órganos.
En uno de los casos, un paciente de 15 años con
fibrosis quística y una infección diseminada por
Mycobacterium abscessus fue tratado con un
cóctel de tres fagos después de un trasplante
bilateral de pulmón. Se desarrollaron fagos líticos
genéticamente modificados que demostraron
gran eficacia contra la cepa infecciosa de M.
abscessus (12). Es importante destacar que la
fibrosis quística es una enfermedad genética
que afecta a los pulmones y al sistema digestivo,
causando obstrucción y problemas respiratorios
(13). En consecuencia, esta condición debilita
el sistema inmunitario. El paciente en cuestión
recibió un tratamiento intravenoso con fagos, el
cual fue bien tolerado y se asoció con una mejora
clínica objetiva, que incluyó el cierre de la herida
esternal, una mejoría en la función hepática y una
resolución sustancial de los nódulos cutáneos
infectados (12).
En otro caso, un paciente de 12 años con
fibrosis quística trasplantado de pulmón recibió
dos rondas de terapia con fagos debido a
una infección pulmonar persistente causada
por Achromobacter xylosoxidans resistente a
múltiples fármacos. La tolerancia clínica fue
perfecta, pero en el lavado broncoalveolar inicial
aún se detectó crecimiento de A. xylosoxidans.
La condición respiratoria del paciente mejoró
lentamente y se suspendió la terapia de oxígeno.
La colonización de las vías respiratorias por
A. xylosoxidans de baja intensidad persistió
durante meses antes de que las muestras dieran
resultados negativos (14).
En otro estudio, se reportó que dos pacientes
con trasplante de pulmón dependientes de
ventilador con complicaciones en las vías
respiratorias superiores y neumonía refractaria
por Pseudomonas aeruginosa multirresistente
respondieron clínicamente a la fagoterapia y
fueron dados de alta del hospital sin necesidad
de soporte ventilatorio (15). En otro estudio, un
paciente de sexo mujer de 26 años infectada
por la misma bacteria y que adicionalmente
presentaba insuficiencia respiratoria persistente
y fallo renal inducido por colistina recibió una
terapia intravenosa con bacteriófagos junto con
antibióticos sistémicos. Esta terapia no produjo
eventos adversos y conllevó a la resolución
clínica de la infección. Esta paciente no presentó
60Igor Eduardo Astudillo Skliarova, et al.Volumen 14 Número 2 - 2023
recurrencia de neumonía por P. aeruginosa y
exacerbación de la fibrosis quística en los 100
días posteriores al final de la terapia intravenosa,
y posteriormente se sometió con éxito a un
trasplante bilateral de pulmón 9 meses después
(16).
Otro estudio reportó el caso de una paciente de
sexo mujer de 17 años de edad. Esta paciente
desarrolló urosespsis causada por Escherichia
coli productora de beta-lactamasa de espectro
extendido (BLEE), mientras recibía un régimen
inmunosupresor debido al rechazo renal
secundario, el cual fue ocasionado por una mala
adherencia a la terapia de inmunosupresión.
Luego de una larga terapia con múltiples
antibióticos, la paciente aún presentaba
infecciones recurrentes de urosepsis. Por tal
motivo, la paciente se sometió a un tratamiento
con un cóctel de dos fagos específicos para la
bacteria aislada. Después de un prolongado
tratamiento con antibióticos y posteriormente
un tratamiento intravenoso con fagos durante
tres semanas, no se encontró E. coli productora
de BLEE en sus cultivos urinarios durante cuatro
años después del tratamiento (17).
La eficacia de la combinación de antibióticos
y fagoterapia también se refleja en el caso de
un paciente de 58 años de edad que desarrolló
una infección recurrente al tracto urinario
causado por una cepa de Klebsiella pneumoniae
productora de BLEE en el primer mes luego de
un trasplante renal. La terapia de antibióticos
no tuvo éxito debido a que la infección recidivó.
La infección posteriormente evolucionó hacia
una epididimitis que fue tratada con éxito con
meropenem y fagoterapia (18).
La fagoterapia es una terapia segura, pero su
eficacia en ocasiones no es clara. Esto se refleja en
otro estudio que reportó el caso de un paciente
de 60 años, el cual después de un trasplante
renal fue ingresado repetidamente en el hospital
con infecciones del tracto urinario recurrentes
causadas por K. pneumoniae productora de BLEE,
que muestra una susceptibilidad variable a los
antibióticos carbapenémicos y una susceptibilidad
completa solo a la colistina. El trasplante renal se
realizó debido a una insuficiencia renal causada
por enfermedad renal poliquística. El paciente
experimentó 12 episodios graves de infección del
tracto urinario por K. pneumoniae en un período
de 15 meses desde el trasplante. Este paciente
fue sometido a la fagoterapia y siguió un curso
de 29 días. No se reportó efectos secundarios,
pero no está claro si esta terapia fue eficaz en
este caso (19). Una infección causada por esta
misma bacteria fue también tratada con éxito
en un paciente de 70 años que había recibido un
trasplante de hígado y riñón (20).
Sin embargo, varios casos reportan el fallo de
la fagoterapia. En uno de los casos, un paciente
receptor de trasplante de pulmón con fibrosis
quística e infección por Burkholderia multivorans
fue tratado con terapia de fagos inhalados durante
7 días antes de fallecer (21). En otro caso, se aplicó
la fagoterapia en un paciente que presentaba
infección recurrente por una bacteria del mismo
género, pero de la especie Burkholderia dolosa,
después de un trasplante de pulmón. Después de
iniciar la terapia, las opacidades consolidativas
en los pulmones mejoraron y se inició el destete
del ventilador. Sin embargo, la infección recidivó
durante la terapia con fagos y el paciente falleció
(15).
Fagoterapia para tratar infecciones de prótesis y
dispositivos médicos.
Muchas bacterias patógenas tienen la
habilidad de formar biopelículas en prótesis.
Las biopelículas son altamente resistentes a
antibióticos, especialmente debido a la existencia
de células persistentes (22). En varios estudios, se
ha demostrado que los bacteriófagos son eficaces
en la eliminación de biopelículas in vitro (23).
La fagoterapia se ha usado de forma satisfactoria
en varios casos de pacientes que tenían prótesis
o dispositivos médicos. Éste es el caso de un
paciente de 62 años de edad que presentaba una
infección de K. pneumoniae en su rodilla protésica
con riesgo de comprometer la extremidad. Este
paciente tenía antecedentes de artroplastia
total de rodilla derecha realizada hace 11 años
y había sufrido múltiples episodios de infección
de la rodilla protésica a pesar de numerosas
cirugías y cursos prolongados de antibióticos.
Debido al empeoramiento clínico progresivo y al
desarrollo de alergias graves a los antibióticos, se
le había ofrecido al paciente la amputación de la
extremidad debido a la persistente infección de la
rodilla protésica derecha causada por el complejo
K. pneumoniae. Por tal motivo, el paciente recibió
40 dosis intravenosas de un solo fago (KpJH46Φ2)
dirigido a la bacteria aislada en conjunto con
una continua administración de minociclina.
El paciente no experimentó efectos adversos
recurrencia de neumonía por P. aeruginosa y
exacerbación de la fibrosis quística en los 100
días posteriores al final de la terapia intravenosa,
y posteriormente se sometió con éxito a un
trasplante bilateral de pulmón 9 meses después
(16).
Otro estudio reportó el caso de una paciente de
sexo mujer de 17 años de edad. Esta paciente
desarrolló urosespsis causada por Escherichia
coli productora de beta-lactamasa de espectro
extendido (BLEE), mientras recibía un régimen
inmunosupresor debido al rechazo renal
secundario, el cual fue ocasionado por una mala
adherencia a la terapia de inmunosupresión.
Luego de una larga terapia con múltiples
antibióticos, la paciente aún presentaba
infecciones recurrentes de urosepsis. Por tal
motivo, la paciente se sometió a un tratamiento
con un cóctel de dos fagos específicos para la
bacteria aislada. Después de un prolongado
tratamiento con antibióticos y posteriormente
un tratamiento intravenoso con fagos durante
tres semanas, no se encontró E. coli productora
de BLEE en sus cultivos urinarios durante cuatro
años después del tratamiento (17).
La eficacia de la combinación de antibióticos
y fagoterapia también se refleja en el caso de
un paciente de 58 años de edad que desarrolló
una infección recurrente al tracto urinario
causado por una cepa de Klebsiella pneumoniae
productora de BLEE en el primer mes luego de
un trasplante renal. La terapia de antibióticos
no tuvo éxito debido a que la infección recidivó.
La infección posteriormente evolucionó hacia
una epididimitis que fue tratada con éxito con
meropenem y fagoterapia (18).
La fagoterapia es una terapia segura, pero su
eficacia en ocasiones no es clara. Esto se refleja en
otro estudio que reportó el caso de un paciente
de 60 años, el cual después de un trasplante
renal fue ingresado repetidamente en el hospital
con infecciones del tracto urinario recurrentes
causadas por K. pneumoniae productora de BLEE,
que muestra una susceptibilidad variable a los
antibióticos carbapenémicos y una susceptibilidad
completa solo a la colistina. El trasplante renal se
realizó debido a una insuficiencia renal causada
por enfermedad renal poliquística. El paciente
experimentó 12 episodios graves de infección del
tracto urinario por K. pneumoniae en un período
de 15 meses desde el trasplante. Este paciente
fue sometido a la fagoterapia y siguió un curso
de 29 días. No se reportó efectos secundarios,
pero no está claro si esta terapia fue eficaz en
este caso (19). Una infección causada por esta
misma bacteria fue también tratada con éxito
en un paciente de 70 años que había recibido un
trasplante de hígado y riñón (20).
Sin embargo, varios casos reportan el fallo de
la fagoterapia. En uno de los casos, un paciente
receptor de trasplante de pulmón con fibrosis
quística e infección por Burkholderia multivorans
fue tratado con terapia de fagos inhalados durante
7 días antes de fallecer (21). En otro caso, se aplicó
la fagoterapia en un paciente que presentaba
infección recurrente por una bacteria del mismo
género, pero de la especie Burkholderia dolosa,
después de un trasplante de pulmón. Después de
iniciar la terapia, las opacidades consolidativas
en los pulmones mejoraron y se inició el destete
del ventilador. Sin embargo, la infección recidivó
durante la terapia con fagos y el paciente falleció
(15).
Fagoterapia para tratar infecciones de prótesis y
dispositivos médicos.
Muchas bacterias patógenas tienen la
habilidad de formar biopelículas en prótesis.
Las biopelículas son altamente resistentes a
antibióticos, especialmente debido a la existencia
de células persistentes (22). En varios estudios, se
ha demostrado que los bacteriófagos son eficaces
en la eliminación de biopelículas in vitro (23).
La fagoterapia se ha usado de forma satisfactoria
en varios casos de pacientes que tenían prótesis
o dispositivos médicos. Éste es el caso de un
paciente de 62 años de edad que presentaba una
infección de K. pneumoniae en su rodilla protésica
con riesgo de comprometer la extremidad. Este
paciente tenía antecedentes de artroplastia
total de rodilla derecha realizada hace 11 años
y había sufrido múltiples episodios de infección
de la rodilla protésica a pesar de numerosas
cirugías y cursos prolongados de antibióticos.
Debido al empeoramiento clínico progresivo y al
desarrollo de alergias graves a los antibióticos, se
le había ofrecido al paciente la amputación de la
extremidad debido a la persistente infección de la
rodilla protésica derecha causada por el complejo
K. pneumoniae. Por tal motivo, el paciente recibió
40 dosis intravenosas de un solo fago (KpJH46Φ2)
dirigido a la bacteria aislada en conjunto con
una continua administración de minociclina.
El paciente no experimentó efectos adversos
61FAGOTERAPIA: UNA ALTERNATIVA TERAPÉUTICA PROMETEDORA
CUANDO LOS ANTIBIÓTICOS NO FUNCIONAN.Volumen 14 Número 2 - 2023
relacionados con el tratamiento y se mantuvo
asintomático 34 semanas después de finalizar el
tratamiento, mientras aún recibía minociclina.
El uso de la fagoterapia estuvo asociada a una
mejora notable y la reducción de la biopelícula
en la prótesis de rodilla (24).
Otro estudio reportó el caso de un paciente de
51 años de edad con dispositivo de asistencia
ventricular izquierdo que fue readmitido en
nuestro hospital presentando signos de infección
sistémica. Debido a la severidad de la infección,
se realizó la aplicación local de bacteriófagos
dentro del cierre de la herida. Con el objetivo
de concentrar los fagos en el sitio de infección,
se aplicaron los mismos utilizando una nueva
formulación semilíquida. Después del cierre
de la herida, el paciente fue dado de alta sin
complicaciones. Esta forma de aplicación de los
fagos demostró una alta eficacia, ya que permitió
la retención de los fagos en el sitio de la herida
(25).
En otro caso, los bacteriófagos también fueron
administrados directamente en el sitio de
infección. Este es el caso de un hombre de 70
años de edad y en buen estado de salud que
inicialmente presentó una rotura irreparable del
manguito rotatorio, la cual fue tratada con una
artroplastia inversa de hombro izquierdo. Tres
semanas después, una caída traumática causó
una fractura glenoidea. Esto fue tratado con una
revisión quirúrgica de la artroplastia inversa de
hombro y reducción abierta y fijación interna
de la glenoide. El paciente presentó luego una
infección causada por K. pneumoniae productora
de BLEE. Este paciente luego recibió un curso
del antibiótico artepenem, al cual más tarde se
agregó una terapia de dos fagos líticos: KP1 and
KP2. Estos fagos fueron administrados de forma
intravenosa con ayuda de un catéter Hickman por
dos días consecutivos (26).
La eficacia de la combinación de antibióticos con
fagos se demostró en un paciente de 65 años
con una válvula aórtica mecánica de 30 años
de antigüedad. Este paciente se presentó con
una semana de malestar, disnea severa al hacer
esfuerzo y dolor torácico pleurítico central. En
las muestras de sangre del paciente se detectó
Staphylococcus aureus sensible a la meticilina.
Este paciente recibió una terapia de fago AB-
SA01 intravenoso dos veces al día durante 14
días en conjunto con los antibióticos recetados.
Las infusiones del fago fueron bien toleradas
por el paciente (27). Otro estudio, analiza el caso
de un paciente con una infección de dispositivo
médico por S. aureus. Este paciente recibió un
curso de fagoterapia que contenía tres fagos en
conjunto con antibióticos. Esta terapia tuvo una
duración de cuatro semanas y demostró una alta
eficacia (28). De la misma forma, la fagoterapia
ha demostrado eficacia contra S. aureus en otro
caso, donde un paciente de sexo femenino de 61
años de edad fue tratado con éxito después de
un segundo ciclo de fagoterapia administrada
durante un procedimiento de reemplazo en
dos etapas para una persistente infección en la
articulación de la rodilla protésica (29).
Adicionalmente, se reportó un caso del uso de la
fagoterapia para tratar prótesis infectadas por la
P. aerugionosa multirresistente (30), la cual es una
bacteria altamente resistente a antibióticos (31).
Este caso se presentó en una mujer que padecía de
síndrome metabólico e insuficiencia renal crónica
con una tasa estimada de filtración glomerular.
Además, presentó un diagnóstico de infección
recurrente de la articulación de la rodilla derecha
y osteomielitis crónica del fémur después de una
lesión por disparo. En este estudio se demostró la
eficacia de la fagoterapia adjunta para tratar una
infección crónica recurrente de la articulación
periprotésica de la rodilla y osteomielitis crónica
del fémur. La fagoterapia adjunta es una terapia
que combina antibióticos y fagos. En este caso,
esta forma de terapia erradicó la infección y no
se observaron efectos secundarios de los fagos
(30). En un caso similar, se reportó un paciente
masculino de 76 años presentó osteoartritis en la
cadera izquierda. Este paciente se sometió a una
artroplastia de cadera, pero luego la periprótesis
se infectó de forma recurrente por Enterococcus
faecalis (32), que es una bacteria que tiene la
habilidad desarrollar biopelículas (33). Esta
bacteria resultó, adicionalmente, ser resistente
a la doxiciclina. El paciente en cuestión viajó a
Georgia para obtener ampollas de Piófagos e
IntestiFagos, cuya composición exacta de fagos o
concentración era desconocida. Sin embargo, el
uso de dichas ampollas parece haber sido eficaz
en la erradicación de la infección causada por E.
faecalis (32).
Fagoterapia para tratar infecciones en pacientes
con fibrosis quística.
Aparte de los casos analizados en pacientes que
han recibido trasplante de pulmón y padecen de
fibrosis quística (12, 14), la fagoterapia también
CUANDO LOS ANTIBIÓTICOS NO FUNCIONAN.Volumen 14 Número 2 - 2023
relacionados con el tratamiento y se mantuvo
asintomático 34 semanas después de finalizar el
tratamiento, mientras aún recibía minociclina.
El uso de la fagoterapia estuvo asociada a una
mejora notable y la reducción de la biopelícula
en la prótesis de rodilla (24).
Otro estudio reportó el caso de un paciente de
51 años de edad con dispositivo de asistencia
ventricular izquierdo que fue readmitido en
nuestro hospital presentando signos de infección
sistémica. Debido a la severidad de la infección,
se realizó la aplicación local de bacteriófagos
dentro del cierre de la herida. Con el objetivo
de concentrar los fagos en el sitio de infección,
se aplicaron los mismos utilizando una nueva
formulación semilíquida. Después del cierre
de la herida, el paciente fue dado de alta sin
complicaciones. Esta forma de aplicación de los
fagos demostró una alta eficacia, ya que permitió
la retención de los fagos en el sitio de la herida
(25).
En otro caso, los bacteriófagos también fueron
administrados directamente en el sitio de
infección. Este es el caso de un hombre de 70
años de edad y en buen estado de salud que
inicialmente presentó una rotura irreparable del
manguito rotatorio, la cual fue tratada con una
artroplastia inversa de hombro izquierdo. Tres
semanas después, una caída traumática causó
una fractura glenoidea. Esto fue tratado con una
revisión quirúrgica de la artroplastia inversa de
hombro y reducción abierta y fijación interna
de la glenoide. El paciente presentó luego una
infección causada por K. pneumoniae productora
de BLEE. Este paciente luego recibió un curso
del antibiótico artepenem, al cual más tarde se
agregó una terapia de dos fagos líticos: KP1 and
KP2. Estos fagos fueron administrados de forma
intravenosa con ayuda de un catéter Hickman por
dos días consecutivos (26).
La eficacia de la combinación de antibióticos con
fagos se demostró en un paciente de 65 años
con una válvula aórtica mecánica de 30 años
de antigüedad. Este paciente se presentó con
una semana de malestar, disnea severa al hacer
esfuerzo y dolor torácico pleurítico central. En
las muestras de sangre del paciente se detectó
Staphylococcus aureus sensible a la meticilina.
Este paciente recibió una terapia de fago AB-
SA01 intravenoso dos veces al día durante 14
días en conjunto con los antibióticos recetados.
Las infusiones del fago fueron bien toleradas
por el paciente (27). Otro estudio, analiza el caso
de un paciente con una infección de dispositivo
médico por S. aureus. Este paciente recibió un
curso de fagoterapia que contenía tres fagos en
conjunto con antibióticos. Esta terapia tuvo una
duración de cuatro semanas y demostró una alta
eficacia (28). De la misma forma, la fagoterapia
ha demostrado eficacia contra S. aureus en otro
caso, donde un paciente de sexo femenino de 61
años de edad fue tratado con éxito después de
un segundo ciclo de fagoterapia administrada
durante un procedimiento de reemplazo en
dos etapas para una persistente infección en la
articulación de la rodilla protésica (29).
Adicionalmente, se reportó un caso del uso de la
fagoterapia para tratar prótesis infectadas por la
P. aerugionosa multirresistente (30), la cual es una
bacteria altamente resistente a antibióticos (31).
Este caso se presentó en una mujer que padecía de
síndrome metabólico e insuficiencia renal crónica
con una tasa estimada de filtración glomerular.
Además, presentó un diagnóstico de infección
recurrente de la articulación de la rodilla derecha
y osteomielitis crónica del fémur después de una
lesión por disparo. En este estudio se demostró la
eficacia de la fagoterapia adjunta para tratar una
infección crónica recurrente de la articulación
periprotésica de la rodilla y osteomielitis crónica
del fémur. La fagoterapia adjunta es una terapia
que combina antibióticos y fagos. En este caso,
esta forma de terapia erradicó la infección y no
se observaron efectos secundarios de los fagos
(30). En un caso similar, se reportó un paciente
masculino de 76 años presentó osteoartritis en la
cadera izquierda. Este paciente se sometió a una
artroplastia de cadera, pero luego la periprótesis
se infectó de forma recurrente por Enterococcus
faecalis (32), que es una bacteria que tiene la
habilidad desarrollar biopelículas (33). Esta
bacteria resultó, adicionalmente, ser resistente
a la doxiciclina. El paciente en cuestión viajó a
Georgia para obtener ampollas de Piófagos e
IntestiFagos, cuya composición exacta de fagos o
concentración era desconocida. Sin embargo, el
uso de dichas ampollas parece haber sido eficaz
en la erradicación de la infección causada por E.
faecalis (32).
Fagoterapia para tratar infecciones en pacientes
con fibrosis quística.
Aparte de los casos analizados en pacientes que
han recibido trasplante de pulmón y padecen de
fibrosis quística (12, 14), la fagoterapia también
62Igor Eduardo Astudillo Skliarova, et al.Volumen 14 Número 2 - 2023
se ha empleado para tratar infecciones en
pacientes con fibrosis quística. Éste es el caso de
un paciente de sexo mujer de 17 años de edad
con fibrosis quística. Esta paciente contrajo
una infección crónica pulmonar causada por A.
xylosoxidans multirresistente. La fagoterapia fue
usada de forma exitosa en este caso (34).
En otro caso, se reportó el uso combinado
de fagos con cefiderocol y meropenem/
vaborbactam para tratar una infección causada
por una bacteria del género Achromobacter
resistente a todos los antibióticos. Este caso se
dio en una paciente de sexo mujer de 10 años de
edad con fibrosis quística. En la terapia se empleó
el fago Ax2CJ45ϕ2 en dos ingresos separados
al hospital. Cabe destacar que la bacteria era
también resistente a los antibióticos cefiderocol y
meropenem/vaborbactam, lo que sugiere que el
uso del fago fue esencial para tratar la infección
(35).
Fagoterapia para tratar infecciones al sistema
nervioso central.
El éxito del uso de la fagoterapia en infecciones
al sistema nervioso central se reportó en un
paciente de sexo mujer de 29 años de edad que
padecía de empiema extradural (36). El empiema
extradural es una acumulación de pus o infección
en el espacio extradural, que se encuentra fuera
de la duramadre que cubre la médula espinal y
el cerebro (37). Esta infección fue causada por S.
aureus sensible a la meticilina. La estrategia de
terapia combinó la administración local de dos
fagos diferentes a través de la fístula de la piel y
la administración parenteral de dalbavancina. A
los trece meses de la terapia, la paciente está viva
y saludable. Fue dada de alta del hospital. Hasta
la fecha, no se ha observado ninguna recaída de
la infección (36).
5. Conclusiones
Tras analizar los estudios en la presente revisión
bibliográfica no sistemática, se concluye que
la fagoterapia ha demostrado ser exitosa en
diversos casos en los que la terapia convencional
de antibióticos ha fallado, como infecciones en
pacientes con trasplante de órganos, prótesis
y dispositivos médicos, fibrosis quística o
infecciones en el sistema nervioso central.
Sin embargo, es importante destacar que la
fagoterapia no siempre ha tenido el efecto
deseado en estos casos, por lo que se requiere
1. Shkoporov AN, Hill C. Bacteriophages of
the Human Gut: The "Known Unknown"
of the Microbiome. Cell Host Microbe.
2019;25(2):195-209.
2. Żaczek M, Weber-Dąbrowska B,
Międzybrodzki R, Łusiak-Szelachowska
M, Górski A. Phage Therapy in Poland - a
Centennial Journey to the First Ethically
Approved Treatment Facility in Europe.
Front Microbiol. 2020;11:1056.
3. Gibb B, Hyman P, Schneider CL. The Many
Applications of Engineered Bacteriophages-
An Overview. Pharmaceuticals (Basel).
2021;14(7).
4. Bhandare S, Colom J, Baig A, Ritchie JM,
Bukhari H, Shah MA, et al. Reviving Phage
Therapy for the Treatment of Cholera.
The Journal of Infectious Diseases.
2018;219(5):786-94.
5. Myelnikov D. Creature features: The lively
narratives of bacteriophages in Soviet
biology and medicine. Notes Rec R Soc Lond.
2020;74(4):579-97.
6. Kortright KE, Chan BK, Koff JL, Turner PE.
Phage Therapy: A Renewed Approach to
Combat Antibiotic-Resistant Bacteria. Cell
Host Microbe. 2019;25(2):219-32.
7. Boeckaerts D, Stock M, Criel B, Gerstmans
H, De Baets B, Briers Y. Predicting
bacteriophage hosts based on sequences
of annotated receptor-binding proteins.
Scientific Reports. 2021;11(1):1467.
8. Paule A, Frezza D, Edeas M. Microbiota
and Phage Therapy: Future Challenges in
Medicine. Medical Sciences. 2018;6(4):86.
9. Divya Ganeshan S, Hosseinidoust Z. Phage
Therapy with a Focus on the Human
Microbiota. Antibiotics (Basel). 2019;8(3).
10. Loc-Carrillo C, Abedon ST. Pros and
cons of phage therapy. Bacteriophage.
2011;1(2):111-4.
11. Aslam S, Lampley E, Wooten D, Karris M,
Benson C, Strathdee S, et al. Lessons Learned
From the First 10 Consecutive Cases of
Intravenous Bacteriophage Therapy to Treat
más investigación y estudios clínicos para
comprender plenamente su eficacia y seguridad.
5. Referencias bibliográficas
se ha empleado para tratar infecciones en
pacientes con fibrosis quística. Éste es el caso de
un paciente de sexo mujer de 17 años de edad
con fibrosis quística. Esta paciente contrajo
una infección crónica pulmonar causada por A.
xylosoxidans multirresistente. La fagoterapia fue
usada de forma exitosa en este caso (34).
En otro caso, se reportó el uso combinado
de fagos con cefiderocol y meropenem/
vaborbactam para tratar una infección causada
por una bacteria del género Achromobacter
resistente a todos los antibióticos. Este caso se
dio en una paciente de sexo mujer de 10 años de
edad con fibrosis quística. En la terapia se empleó
el fago Ax2CJ45ϕ2 en dos ingresos separados
al hospital. Cabe destacar que la bacteria era
también resistente a los antibióticos cefiderocol y
meropenem/vaborbactam, lo que sugiere que el
uso del fago fue esencial para tratar la infección
(35).
Fagoterapia para tratar infecciones al sistema
nervioso central.
El éxito del uso de la fagoterapia en infecciones
al sistema nervioso central se reportó en un
paciente de sexo mujer de 29 años de edad que
padecía de empiema extradural (36). El empiema
extradural es una acumulación de pus o infección
en el espacio extradural, que se encuentra fuera
de la duramadre que cubre la médula espinal y
el cerebro (37). Esta infección fue causada por S.
aureus sensible a la meticilina. La estrategia de
terapia combinó la administración local de dos
fagos diferentes a través de la fístula de la piel y
la administración parenteral de dalbavancina. A
los trece meses de la terapia, la paciente está viva
y saludable. Fue dada de alta del hospital. Hasta
la fecha, no se ha observado ninguna recaída de
la infección (36).
5. Conclusiones
Tras analizar los estudios en la presente revisión
bibliográfica no sistemática, se concluye que
la fagoterapia ha demostrado ser exitosa en
diversos casos en los que la terapia convencional
de antibióticos ha fallado, como infecciones en
pacientes con trasplante de órganos, prótesis
y dispositivos médicos, fibrosis quística o
infecciones en el sistema nervioso central.
Sin embargo, es importante destacar que la
fagoterapia no siempre ha tenido el efecto
deseado en estos casos, por lo que se requiere
1. Shkoporov AN, Hill C. Bacteriophages of
the Human Gut: The "Known Unknown"
of the Microbiome. Cell Host Microbe.
2019;25(2):195-209.
2. Żaczek M, Weber-Dąbrowska B,
Międzybrodzki R, Łusiak-Szelachowska
M, Górski A. Phage Therapy in Poland - a
Centennial Journey to the First Ethically
Approved Treatment Facility in Europe.
Front Microbiol. 2020;11:1056.
3. Gibb B, Hyman P, Schneider CL. The Many
Applications of Engineered Bacteriophages-
An Overview. Pharmaceuticals (Basel).
2021;14(7).
4. Bhandare S, Colom J, Baig A, Ritchie JM,
Bukhari H, Shah MA, et al. Reviving Phage
Therapy for the Treatment of Cholera.
The Journal of Infectious Diseases.
2018;219(5):786-94.
5. Myelnikov D. Creature features: The lively
narratives of bacteriophages in Soviet
biology and medicine. Notes Rec R Soc Lond.
2020;74(4):579-97.
6. Kortright KE, Chan BK, Koff JL, Turner PE.
Phage Therapy: A Renewed Approach to
Combat Antibiotic-Resistant Bacteria. Cell
Host Microbe. 2019;25(2):219-32.
7. Boeckaerts D, Stock M, Criel B, Gerstmans
H, De Baets B, Briers Y. Predicting
bacteriophage hosts based on sequences
of annotated receptor-binding proteins.
Scientific Reports. 2021;11(1):1467.
8. Paule A, Frezza D, Edeas M. Microbiota
and Phage Therapy: Future Challenges in
Medicine. Medical Sciences. 2018;6(4):86.
9. Divya Ganeshan S, Hosseinidoust Z. Phage
Therapy with a Focus on the Human
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10. Loc-Carrillo C, Abedon ST. Pros and
cons of phage therapy. Bacteriophage.
2011;1(2):111-4.
11. Aslam S, Lampley E, Wooten D, Karris M,
Benson C, Strathdee S, et al. Lessons Learned
From the First 10 Consecutive Cases of
Intravenous Bacteriophage Therapy to Treat
más investigación y estudios clínicos para
comprender plenamente su eficacia y seguridad.
5. Referencias bibliográficas
63FAGOTERAPIA: UNA ALTERNATIVA TERAPÉUTICA PROMETEDORA
CUANDO LOS ANTIBIÓTICOS NO FUNCIONAN.Volumen 14 Número 2 - 2023
Multidrug-Resistant Bacterial Infections at
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use of bacteriophage therapy for treatment
of multidrug-resistant Pseudomonas
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Adjuvant to Antibiotics for the Treatment
64Igor Eduardo Astudillo Skliarova, et al.Volumen 14 Número 2 - 2023
of Periprosthetic Joint Infection Caused
by Multidrug-Resistant Pseudomonas
aeruginosa. Antimicrob Agents Chemother.
2019;64(1).
31. Pang Z, Raudonis R, Glick BR, Lin TJ, Cheng
Z. Antibiotic resistance in Pseudomonas
aeruginosa: mechanisms and alternative
therapeutic strategies. Biotechnol Adv.
2019;37(1):177-92.
32. Neuts AS, Berkhout HJ, Hartog A, Goosen
JHM. Bacteriophage therapy cures a
recurrent Enterococcus faecalis infected
total hip arthroplasty? A case report. Acta
Orthop. 2021;92(6):678-80.
33. Kristich CJ, Li YH, Cvitkovitch DG, Dunny
GM. Esp-independent biofilm formation
by Enterococcus faecalis. J Bacteriol.
2004;186(1):154-63.
34. Hoyle N, Zhvaniya P, Balarjishvili N,
Bolkvadze D, Nadareishvili L, Nizharadze D,
et al. Phage therapy against Achromobacter
xylosoxidans lung infection in a patient with
cystic fibrosis: a case report. Research in
Microbiology. 2018;169(9):540-2.
35. Gainey AB, Burch AK, Brownstein MJ, Brown
DE, Fackler J, Horne B, et al. Combining
bacteriophages with cefiderocol and
meropenem/vaborbactam to treat a pan-
drug resistant Achromobacter species
infection in a pediatric cystic fibrosis patient.
Pediatr Pulmonol. 2020;55(11):2990-4.
36. Bleibtreu A, Fevre C, Robert J, Haddad
E, Caumes E, Lantieri L, et al. Combining
bacteriophages and dalbavancin for salvage
therapy of complex Staphylococcus aureus
extradural empyema. Médecine et Maladies
Infectieuses. 2020;50(5):458-9.
37. Pippo A, Legnani M, Mérola V, Higgie JR,
Silvariño R. Empiema epidural espinal:
clínica, diagnóstico y tratamiento
a propósito de tres casos. Revista
Médica del Uruguay. 2015;31:289-92.
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by Multidrug-Resistant Pseudomonas
aeruginosa. Antimicrob Agents Chemother.
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meropenem/vaborbactam to treat a pan-
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